Soy Ro Babikow Coach de Vida Trabajo al servicio de quienes me eligen para acompañarlos, desde agosto del 2005
¿Y por qué me eligen?
Cuando pregunto esto a quienes vienen a las consultas, suelen responder “por tu manera de SER”.
¿Qué manera de SER será esa?… te estarás preguntando… Esa manera de ser es resultado de mis vivencias. Y es resultado de actuar diariamente de manera auténtica, genuina, íntegra y coherente, profesando lo que predico.

Quiero hacerte notar que hay mucha diferencia entre quienes podemos HACER nuestro trabajo desde quienes SOMOS, y aquellos que “trabajan como”… y no SON eso que predican. No profesan en sus vidas lo que predican públicamente, solo “muestran una linda fachada” para crear una imagen marketinera.

Vos podés ELEGIR ser acompañado por alguien que, GENUINAMENTE se interesa por FACILITAR que te conviertas en esa persona que QUERÉS ser.
Yo SOY lo que hago Y hago desde quien soy
Mi entrega es auténtica y total.
El interés por lo que el otro trae a la consulta, es genuino.
Mi compromiso con el compromiso de quien me contrata, es del cien por ciento. Yo me comprometo con TU compromiso.
Sos vos quien elige y decide qué es lo que quiere transformar en su vida.
En una sesión de coaching, mi manera de preguntar genera que vos reflexiones sobre “cómo estás mirando lo que estás mirando”.
Es esa particular manera de estar siendo tuya, la que ve, de esa particular manera, lo que ve. Aclaramos: para otra persona, que mira de otra manera, “eso mismo” que para vos está siendo “un área a transformar”, no lo sería para ese otro ser.
Yo Vivo esta profesión como un ARTE
Las competencias que pongo a tu servicio en cada sesión de coaching facilitan que VOS realices el PROCESO necesario para convertirte en esa versión de vos que necesitas ser, para lograr eso que la versión actual no está logrando.
Además de las competencias profesionales y de lo meramente técnico (que lleva implícita una conversación de coaching), considero que hay quienes vivimos esta profesión como un arte.
La misma situación, abordada por dos coaches diferentes, logra resultados diferentes, mediante procesos diferentes.

La diferencia está en la manera de SER coach del coach que facilita el proceso de coaching.
En la manera en cómo te escucho… en la manera en la que logro generar confianza en vos… en la manera en que obtengo tu apertura suficiente para conversar como “si ya nos conociéramos”.
Es esa manera diferente de generar ese contexto previo, una de las diferencias que notan en mis consultas.


Otra enorme diferencia es mi voto de confidencialidad.
¿Qué es la CONFIDENCIALIDAD?
Es mi promesa de que lo conversado en la consulta es secreto profesional.
Aun cuando me ha tocado atender a ambas partes de una pareja, ninguna de las partes sabe el contenido de mis conversaciones con la otra persona.
Eso es un gran diferencial hoy y lo ha sido siempre.
Mi respeto a la entrega que haces, al compartir intimidades de tu vida en mis consultas, es total.
En un mundo tan globalizado y tan “expuesto” con el uso de las redes, la confidencialidad es un valor en extinción. Yo te lo prometo.

¿Y por qué me eligen?
Una diferencia más, que convierte en una expresión de arte a cada conversación conmigo, es la particular manera en la que genero empatía con quien me contrata.
Suelen decirme: “tu mirada habla! Tu sonrisa es cálida. Y ambas brillan de una manera especial.”
Una frase común en sus testimonios es: “SOS LUZ. ¡Iluminaste lo que no podía ver!”
Todas esas diferencias, entre otras, los hace volver a elegirme y recomendarme.

A mí me honra escuchar todo lo anterior. También saber que llegan a mí “por referencia”. Realmente es un honor saber que mi tarea ha dejado una bonita huella en quien fue mi cliente. Que esa siembra amorosa siempre me regala una cosecha invaluable.
El coaching es una disciplina que está siendo muy bastardeada en la actualidad.
El motivo es que existen colegas que realizan su tarea de manera muy distinta a lo que te compartí hasta acá.
Entre algunos ejemplos que puedo mencionar, con evidencias concretas, están quienes “trabajan como coaches” sin las competencias indispensables, sin ética, sin confidencialidad, sin respeto por la intimidad de quienes han confiado en ellos y se han sentido defraudados.
Yo te invito a conocerme
Te invito a abandonar el supuesto de que “todos somos lo mismo”.
No es así. Somos distintos. Aun quienes compartimos Formación, maestros y mismos contenidos al adquirir la teoría, nos diferenciamos luego en la práctica.
Es en quienes SOMOS cuando realizamos nuestra tarea, lo que nos diferencia. Desde esa distinta manera de SER, hacemos diferente.
Cada proceso necesita de vos y de mí. Lo hacemos juntos, para eso es mi acompañamiento.
- Los objetivos son tuyos.
- Los compromisos son tuyos.
- Quien quiere una diferencia en su vida sos vos.
Yo soy el espacio que posibilita que lo logres. Yo no le cambio la vida a nadie. Cada uno elige sus propias decisiones, que van construyendo su vida.

Mi servicio facilita que mires desde distintas ópticas
El tiempo es una variable muy variable, valga muy oportunamente la redundancia.
A veces, con una sesión, lo que considerabas un “problema”, deja de serlo… luego de mirarlo diferente.
A veces, lleva más tiempo poder lograr ese “mirar distinto”…
¿Qué pensás vos con todo lo que te compartí? ¿Qué criterios tendrías en observación al momento de elegir a la persona que acompañará tu proceso?
Las sesiones individuales de Coaching, las Mentorías y las demás Propuestas Diversas que ofrezco para lograr un Bienestar Integral, siguen apasionándome cada día más.
Es un privilegio ser testigo de la Transformación y Evolución Personal de quien TE ELIGE para acompañarlo.
Un coach que, además, es mentor, como es mi caso, puede utilizar las herramientas de coaching en su haber para enriquecer sus mentorías.
En el mentoring, el facilitador es llamado mentor. NO necesita ser coach. El mentor puede aconsejar, sugerir, opinar, compartir vivencias personales como ejemplos.
De hecho, ser mentor de una persona implica “saber” sobre la materia que se consulta y transmitir dicha sabiduría.
Es ese, en mi opinión, el mayor de los valores que agrega en cada mentoría.
En la sesión de coaching, en cambio, el coach no necesita “saber” la materia de la consulta.
El coach trabaja sobre la manera de observar de la persona que consulta.
El proceso de coaching tiene como misión transformar esa manera de observar.
Ese “nuevo observador” es quien tomará decisiones diferentes, con las que obtendrá resultados diferentes.